Hace ya muchos siglos que Pitágoras concibió al universo como un vasto instrumento, y a su sonido sagrado como la "música de las esferas".
Pero, ¿como sonaría la "música de las esferas cuando estallan"?, míralo... o mejor dicho, escúchalo por ti mismo.
De abril de 2003 hasta agosto de 2006, el Canada-France-Hawaii Telescope vigiló cuatro zonas del cielo tan frecuentemente como fué posible, armado con la cámara digital más grande en el universo conocido, el CFHT monitoreó estas cuatro zonas buscando un tipo específico de supernovas, conocido como Ia, mismas que son creadas por la explosión termonuclear de una o más estrellas "enanas blancas". La explosión de estas estrellas es tan enérgica que puede ser vista a enormes distancias a través del espacio.
En este periodo de tiempo, el CFHT fué capaz de fotografiar 241 supernovas Ia en un área de 16 veces el tamaño de la luna llena en el cielo, algo así como una diezmilésima parte del cielo visible, con esos datos, Alex H. Parker (de la University of Victoria) y Melissa L. Graham (de la University of California Santa Barbara / LCOGT) asignaron a cada una de ellas una nota y un volumen según la distancia en que se encuentra.
Además, el tono de cada supernova está determinado por una propiedad de las mismas, llamada "Stretch", esta propiedad depende de la velocidad con que la supernova brilla y desaparece en un periodo determinado de tiempo, así, valores más altos dan como resultado notas más altas, siguiendo el Modo Frigio Dominante.
Por último, hay que decir que cada nota es tocada por un instrumento, mismo que se determinó en base a la galaxia que contiene la supernova. Las notas de las supernovas en galaxias masivas se tocan con un contrabajo, y las de galaxias menos masivas con un piano de cola.
Una bella muestra de lo que la ciencia es capaz de inspirar en las mentes que logran ver más allá.
Una bella muestra de lo que la ciencia es capaz de inspirar en las mentes que logran ver más allá.
Ĝis revido!
No hay comentarios:
Publicar un comentario