¿Alguna vez te has fijado en una mancha de salsa en el piso hasta que viste el rostro de Jesús?, o ¿has pasado una romántica tarde con tu novi@ mirando las nubes y hallaste una con forma de corazón?, ¿te has preguntado por que a veces la naturaleza se empeña en mostrarnos formas familiares?
Formas familiares, algunas demasiado familiares |
Ese fenómeno, estimado lector, es llamado pareidolia, curioso nombre que deriva etimológicamente del griego para: "adjunto" y eidolon: "imagen", algo así como "imagen adjunta" y tiene su origen en la tendencia del cerebro humano a buscar patrones reconocibles en todo lo que nos rodea, o parecidos razonables, basandose en la información que ya existe en nuestra memoria. Es algo que no controlamos y que pasa sin querer porque así funciona nuestro cerebro de manera natural, aunque en algunos casos extremos puede llegar a ser patológico.
Esta es la explicación más habitual para los casos de gente que halló el rostro de Jesús en una tortilla, una imagen demoniaca en los videos de los atentados del 11-S, o una cara gigantesca en la superficie marciana de Cydonia (nada que ver con MUSE, se los aseguro).
La misteriosa cara de Marte |
Esta tendencia humana de armar patrones y hallar formas en donde no las hay deliberadamente es usada como herramienta para análisis psicológico en pruebas como el famoso Test de Rorschach (se pronuncia rror-shaj) en donde se nos presentan diez láminas con formas vagas y se nos pide una interpretación de las formas que vemos en ellas.
Y para ejercitar un poco tu percepción, unas cuantas imágenes que éncontré por la red.
Otra cara, esta sobre Mt. Cook, Nueva Zelanda |
Heil Kitler! www.catsthatlooklikehitler.com |
El sueño de muchos vendedores de carnitas, un puerco con seis chamorros |
Perrito en escalera, ¡míralo, hasta la legua se le ve! |
¿Cuantas formas familiares encontraste hoy?
Ĝis revido!
No hay comentarios:
Publicar un comentario